A nuestro pueblo siempre le ha gustado el azar, el juego, la apuesta. Jugarse un Kino, o un cuadrito de caballos, pa´salir de abajo... Desgraciada conducta que ha calado en la masa, que siempre prefiere el facilismo y no el esfuerzo para hacer progresos. Don Arturo Uslar Pietri bastante que señaló este mal que corroe nuestra sociedad...
Los pueblos que perseveran en esta conducta fácilmente son pasto de los gobiernos populistas que se aprovecha para beneficio propio. Promueven la holgazanería. El reparto de dádivas a cambio de un voto; o por la asistencia a la última marcha en apoyo del líder. También se difunden la enseñanza de obtener las cosas sin trabajar, sólo por ser “el soberano”. Así se piensa que cualquiera tiene derecho a apropiarse de lo que otras personas se han ganado con esfuerzo, ingenio y dedicación. Ergo: lo que estamos viviendo en este sainete de revolución…
Para no quedarse atrás y no contravenir los principios socialistas, el Consejo Nacional Electoral (CNE), con miras a las próximas elecciones ha efectuarse en septiembre, para atraer a los jóvenes a inscribirse en el registro electoral, (se calcula en un millón los nuevos votantes) tuvo la genial idea de promover una tómbola, rifa, timba o como se le quiera llamar. ¡Corre a inscribirte!... podrás participar en el sorteo para ganarte varios premios: un viaje a la isla de Margarita, equipos de sonido, televisores y pare usted de contar... ¡Promoción autorizada por el INDEPABIS!... ¿O más bien será que el CNE está convencido que tiene que “engatusar” a los electores para que acudan a inscribirse, por el poco poder de convocatoria y credibilidad que ostenta ante el país?
Es decir que uno de los poderes del Estado, el CNE - por lo que se muestra en la TV- se ha convertido en otro de los muchos centros de apuestas y en vez de enseñar que el voto es un derecho civil: ejercido en democracia, donde la ciudadanía demuestra su civismo, un acto serio y trascendental –del cual se deriva el destino de todos- viene y lo transforma en algo banal e ilusorio. ¡Vaya manera de trastocar los valores!.. Infiero que los jóvenes pensantes, muchos de ellos universitarios, deberán sentir que tal invitación es una soberana ofensa a su intelecto y a su condición de seres con principios éticos. Seguramente habrá otros que la premiación los motive altamente, y si se mostraban apáticos ahora sí participarán; porque este gobierno si que es chévere –no como los anteriores- y me va a dar un premio jugoso, nada más que por registrarme…
Desgraciadamente quienes así piensen caen en el señuelo del CNE, que no los trata como ciudadanos plenos; que les sustrae la solemnidad de ejercer por primera vez un derecho civil que los transforma en responsables de sus actos políticos, ante sí y ante su comunidad. Que en vez de ser personas que a través del voto tienen la potestad de decidir que tipo de gobierno quieren o que no para su país (¡cualquier cosa!), son considerados unos cabezashuecas que van a inscribirse por puro bochinche; a ver si me resuelvo con alguito pa´las vacaciones...Es necesario contar con la participación de los nuevos votantes; pero señores del CNE, la motivación no es la correcta.
El amadolíder que tanto invoca a Don Simón Rodríguez (una de las Misiones lleva su nombre), parece olvidar que no fue precisamente eso de formar socialistas lo que inculcó el maestro en su alumno. Una anécdota cuenta, que una vez conversando en intimidad le dijo Simón (el viejo) a Simón (el joven): “Ya tienes tus repúblicas. Ahora te faltan los republicanos”... Ahi es donde está el meollo del asunto que todos debemos acometer: formar republicanos.
Caracas, mayo 2010
Ilustración (muy significativa) tomada de la web.
No hay comentarios:
Publicar un comentario