28 febrero, 2014

Plan Amor y Paz





Lo que está sucediendo en Venezuela, no puede dejar indiferente a nadie; ni nacionales ni extranjeros. Las protestas afectan a todos por igual,tanto a oficialistas como a opositores, cierto. Los problemas que venimos afrontando desde 1999 también. Es decir: unas son de cal y otras son de arena. Lo señalo, porque hay gente que ahora protesta por los disturbios y guarimbas; gente que vive en la inmediatez y sólo piensa en su comodidad sin darse cuenta que la ciudadanía lleva ya 16 años de "incomodidad", acrecentada este último año por un señor que llegó a Miraflores gracias a una escogencia a dedo y allí se mantiene atando las directrices que recibe de los cubanos hermanos Castro. Los hechos parecen demostrar la veracidad de esta conseja; comenzado por  el vocabulario utilizado por los representantes de la robolución, el racionamiento alimentario, la falta de insumos materiales (repuestos,medicinas, etc), sin derecho a la protesta (consagrado en la Costitución), la censura a los medios de comunicación, la inexistencia de un estado de derecho; hasta la política represiva desplegada por la Guardia Nacional y la Policía Nacional Bolivariana, parecen copia fiel de las tácticas utilizadas por el régimen opresor cubano, desde hace 50 años... Las actuales protestas estudiantiles son precisamente contra todas esos abusos, que acabo de enumerar.

A estas altura de la partida, el gobierno pretende vendernos un Plan de Pacificación, como decimos aquí "de la boca pa´fuera", ya que los hechos contradicen las palabras... Los "esfuerzos conciliatorios" que trata imfructuosamente hacernos ver el Sr. Maduro, no funcionarán hasta tanto el poder Ejecutivo no de un paso importante y sincero, que por ninguna parte aparece. No ganamos nada con reuniones en el palacio de Miraflores convocando a diversos representantes de "las fuerzas vivas", mientras se gobierna para una sola parte de los venezolanos y se relega a la otra mitad... ¿Cómo los estudiantes no van a protestas, con tan pésimas perspectivas de futuro. Cómo no arrecharse si ya llevamos 16 años maltratados, victimizados, señalados en lista infamantes y acorralados, como si no tuviésemos los mismos derechos que cualquier hijo de vecino nacido en este hermoso país.

Contra las manifestaciones (la mayoría convocadas a través de las redes sociales), que vienen sucediéndose desde  el 12F. -día de la juventud- al gobierno se le pasó la mano, en eso de acallar las voces de los chamos (as), que valientemente siempre salen a dar la cara por el país. Con encarcelar a Leopoldo López (uno de los líderes opositores), no apaciguaron los ánimos. Muy por el contrario, el preso se les ha vuelto incómodo por decir lo menos... Las damas también se unieron; movilizaciones generales se han sucedido a lo largo y ancho del país... Los estudiantes solos no tumbarán gobierno, pero sí actúan como ejemplo multiplicador. Es innegable que la protesta ha repercutido mundialmente dejando en claro, que la revolución no es ni tan bonita, ni sus logros tan ciertos...Tanto así que el anodino Canciller que nos gastamos, anda mendigando (con una petrochequera menguada no caben imposiciones), el respaldo de  Unasur para que se pronuncie contra el supuesto golpe de estado que se ha venido fraguando, implementado -no faltaba más- con el apoyo del Imperio: la oligarquía internacional,la derecha fascista, los paramilitares y la mano pelúa del ex-presidente Uribe. 

En definitivas que desgraciadamente ya llevamos 9 muertos a balazos, ciento y pico de heridos y otros desaparecidos (sin distinción de sexo), abusados y maltratados. Hasta hoy no se ha escuchado por parte del Sr. Maduro y su Minst. de Interior, Justicia y Paz (¿?), una palabra de conmiseración por esas criaturas fallecidas. Pero cómo podría haberlas, si esos muerticos son del bando que hay que aniquilar... No son hijos paridos por mujeres venezolanas muy dignas... No fueron jóvenes valiosos de la patria, pues no pertenecían a los colectivos violetos armados, que defiende la revolución a "troche y moche"... Más sucede que los estudiantes están claros: la guarimba continúará aunque el Ejecutivo haya decretado el carnaval y ya estén festejando, para hacer el asunto más vergonzoso. Nosotros, "el otro país" que pretenden ignorar, borrar, masacrar, estamos de duelo y no tenemos absolutamente nada que festejar.


Caracas, febrero 2014
Ilustración sacada de la web.